domingo, 20 de diciembre de 2009

Otra vez cumplo años. . .


. . . y ya pasé los dos tercios de siglo!!!
Soy afortunado, nada me falta y poco a poco todo lo que quiero va apareciendo...

domingo, 13 de diciembre de 2009

Christmas Tree - Está llegando la Navidad


Best wishes to everyone. To all my dearly loved relatives and friends, the ones around here and the others spread around the world, thousand thanks... I may not see some of you much, but I do love and remember all the time we spent together. Do have fun and happiness during the festivities of this ending year and hope the next will be really joyous and very prosper for all and each one. Amen.
Los mejores deseos de prosperidad y alegría para todos los parientes y amigos cercanos y lejanos alrededor de todo este mundo que sigue girando para nuestro bien. Siempre recuerdo los momentos que pasamos juntos y añoro verlos nuevamente. Amèn

miércoles, 9 de diciembre de 2009

El brote de Rosa que se cree colibrí.


Cuando se convierta en rosa, tendrá muchos colibríes...

(Nota que su sombra nos recuerda al símbolo de la paz)

Esta es Sally


Ella me pregunta: Vamos a jugar?

sábado, 5 de diciembre de 2009

Aún es Primavera.


Todos los recién nacidos son hermosos, o no? Hay alguno que no lo sea? Bebés, cachorros, retoños, todos tienen la alegría del comienzo, la belleza de la naturaleza con su perfección y originalidad, como el amanecer de un día nuevo, que nos llena de alegría, nos contagia su vigor, nos invita a realizar.

sábado, 31 de octubre de 2009

Haiku


Candidly,
on the same branch,
moon and sparrow.

Fierce torrent
into the calmed sea,
obediently dilutes.

The blue butterfly
cheers the early morning.
Bye gloomy night.

Amber caterpillar:
illusions of butterfly
on the vine leaves.

The hummingbird
kisses the roses.
Drizzle pours lightly.

Right when we started
burning the fallen leaves
hard rain started.

White winter scene.
Skiing down the mountain.
Roasted chestnuts smell.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Haiku míos traducidos al inglés

.
Autumn mist hides
the lights of the town.
Silent rain drops.


River bed.
Over soaked lifeless leaves
a full moon trembles.

Now and then
during summer sundown
the bluebird shows up.

Naïve summer wind
pulls away and gives the river
our last jasmine.

Frogs croak randomly
Over the high reed
a ray of moonlight.

Dew on the daisy.
Each drop a cosmos
swept by the river.

Sudden rain shower.
The old man looks outside
people running away.

viernes, 11 de septiembre de 2009

Haiku de ultima cosecha


Fiel mosca audaz
atrapa una trucha.
¡Bravo pescador!

Feria estival.
Vocea tenaz el niño:
“¡Sandia madura!”

Rocío en la flor.
Cada gota un cosmos.
Se los lleva el río.

Lluvia súbita:
El anciano ve afuera
gente corriendo.

Chubasco de estío:
En la ya vacía playa
dos perros juegan.

Tras celaje azul
la luna fue magnolia,
por un instante.


Al atardecer,
a veces aparece,
el pájaro azul.

Cae una hoja,
el viento se la lleva…
Cae otra hoja.

Oye el silencio
del capullo de seda.
Oye y medita.

Chubasco de estío:
En la ya vacía playa
dos perros juegan.

Cae la camelia:
pluf! derramando agua
sobre el nido.

Qué es un haiku?

Haiku es una forma de poesía japonesa antigua, propia de la filosofía Zen, que se ha perpetuado y tiene un bien merecido futuro por delante. Hay quien dijo que se trata de “Poesía Mayor”. Y realmente es así, porque a pesar de su tamaño produce un efecto emocional importante. Compendiado en 17 sílabas, distribuidas en tres líneas de 5, 7 y 5 sílabas respectivamente, describe en forma concisa y completa un instante vivencial intenso, que ilumina o emociona al autor (satori ) y queda así congelado en papel y tinta, como si fuera una especie de foto escrita.
El término haiku es relativamente reciente, el primer poeta en emplearlo fue Shiki en el siglo XIX. El haiku proviene de la evolución de unas canciones cortas denominas tankas. Los haiku tradicionales nos hablan de la naturaleza y con sutileza, de los sentimientos. Generalmente hacen referencia a un momento del año, con una palabra o alusión (técnicamente llamada kigo).
Como decía Bashō (1644-1694) –el haijin más famoso– el haiku es simplemente lo que está sucediendo en este lugar, en este momento.
Cuando alguien accede a esta forma de poesía por primera vez, puede pensar que es sencilla su escritura. Pronto comprende que un verdadero haiku debe contener algo más que meras palabras. A través de la lectura de los autores tradicionales, advertimos una diversidad de significados, más que nada porque el idioma japonés es más escueto que las lenguas occidentales, no tiene artículos ni plurales ni conjugaciones, por lo tanto, el texto puede tener distintas interpretaciones al momento de pretender una traducción correcta. Suelen expresar entonces, para nosotros, ideas ambiguas o indefinidas, según qué tan precisa haya sido la traducción, quedando a consideración del lector interpretar su conclusión o significado.
En el arte Zen, el autor se convierte en lo que desea representar. El decorador de jardines se consustancia con su proyecto hasta que se convierte él mismo en el jardín; el pintor del dragón, se vuelve dragón, antes de pintarlo; el arquero es el arco, la flecha y el blanco.
El haijin también es luna, viento, estrella, árbol, pájaro, joven, viejo, alegre, triste, enamorado, vuela, sueña y luego pinta en solamente 17 sílabas ese instante único, en medio de un éxtasis de iluminación.
Algunos de los haijins más famosos fueron personajes de la nobleza, monjes, escribas, señores feudales, o los mismos samurais , que luego de sus guerras, colgaban las armas y se procuraban diferentes formas de abstracción impregnadas de budismo zen, como poesía, diseño de jardines, meditación, bonsái , caligrafía china, pintura y demás actividades.
Es dable ver en tiempos modernos, la presentación de haiku junto a una prosa que destaca el mismo momento memorable. Esa feliz conjunción entre prosa poética, relato o biografía, con uno o más haiku, ha sido acuñada por algunos cultores no tradicionales, con el nombre de Haibun --aunque esta palabra solamente significa "oración".
Hoy día, en todas partes del mundo se escriben haiku por afición o devoción profesional. Generalmente, advertimos la vigencia en el tiempo del hecho que describen, por antiguo que sea.
Muchos son los escritores no japoneses que lo practican. En los talleres y clases de literatura de centros de estudio de todo el orbe, se acude al haiku para lograr fluidez o elocuencia, al describir algo hermoso y sentido, dentro de esa métrica tan breve. Hay que adentrarse en su lectura para descubrir los recursos agudos y sutiles que permiten al autor describir tan eficazmente sentimientos e imágenes de un instante vivencial, que queda plasmado para la posteridad.
Serios escritores de haiku en otros idiomas, apelan a su criterio particular para respetar con flexibilidad razonable, las tradicionales características de esta poesía, ya que en otros idiomas, la métrica original no siempre resulta grata o útil para lograr la belleza y sobriedad propias de un auténtico haiku. En inglés, por ejemplo, a veces es preferible acortarlo, para expresar la idea más estética y efectivamente, puesto que agregar sílabas una vez que se ha dicho lo necesario, solamente para respetar la métrica exacta, no tiene sentido. En español resulta más fácil respetarla, sin embargo hay ocasiones en que la licencia poética se hace valer.
Espero que disfruten de su lectura y por qué no, de su escritura, tanto como yo.
El autor.

viernes, 10 de abril de 2009

Destacados Haikus de Abril

Rozan el lago
reflejos de garzas
al atardecer.

Miro el bosque:
nostálgica ráfaga
surge del cuadro.

Rompe el sedal,
salta para escapar,
cae en el barco.

Rito púrpura:
Quietas, oran las garzas,
al ponerse el sol.

Dóciles brevas
colman mi deseo voraz,
llenas de pasión.

Ardiente centro,
borra ansiedad y estrés,
fluye la vida.

Rezonga al llegar.
Unos vienen otros van.
Pita y se va.

lunes, 30 de marzo de 2009

La Garza Azul

Haiku y Foto


La garza cruza

el lago lentamente,

al ponerse el sol.

.

lunes, 23 de marzo de 2009

Haikus Destacados Recientes, por Carlos R. Curiel

.
Rauda se fuga,
cual pizca de cellisca,
vana la vida.

Cual la hoja muda,
de verde a marchita,
igual la vida.

Fe en sus tiernos
ojos brujos que siempre
me están mirando.

Navegan sobre
olas de alba espuma
Velas de amor.

Sin anunciarse,
estalla la helada vil.
Otra vez solo.

Yace en el valle
la nube hasta el alba.
La iza el sol.

Ni luna ni flor.
Mastica su angustia.
Traga soledad.

domingo, 22 de marzo de 2009

PIEDRA DE TOQUE

Haibun por Carlos R. Curiel

Lleva tiempo olvidar algunas penas, sin embargo, la lejanía y un entorno adecuado suelen templar el espíritu marchito. Buscando un cambio renovador, decido que tal como la piedra de toque convierte el vil metal en oro puro, la soledad de los parajes sureños, sus ríos, sus lagos, sus montañas, lograrán el cambio ansiado.

Naturaleza,
maravillosa gema,
mejora el alma.

Encuentro un buen lugar donde pernoctar. Aún algunos recuerdos me invaden y viendo el paisaje que me rodea, la densa vegetación, el río, las aves y otros animales de la foresta, las imágenes ingratas se van disipando poco a poco.

370
El sauce llora,
la hiedra lo abraza,
el lago lo besa.

Antes de armar la carpa y acomodar todo, sujeto la canoa a un improvisado muelle.
Enciendo el fuego. Se va anunciando la noche.

394
Contra el muelle
bate triste la canoa.
La luna tiembla.

Entre alerces, cipreses, álamos y sauces, el lago me incita, chispeante, glorioso.

338
Tras el macramé
de alerces y cipreses
el lago me espía.

Me encuentro a salvo en medio de la espesura, en lo alto de una loma sobre el torrente cómplice que brama suave y rítmicamente.

La luz de la hoguera juguetea con el verde entorno formando figuras lúdicas que se mueven al compás de la brisa nocturna.

371
Entre las hojas
de las palmeras
la luz dibuja tigres.

Fácilmente concilio el sueño y pronto llega el alba con su clásico trajín.

La canoa se desliza suavemente. Veo cómo las imágenes en su superficie, distorsionadas por acción del viento y el movimiento del río forman dibujos psicodélicos que huyen hacia el mar.

395
El río copia,
el viento desfigura,
luego se fugan.

414
Cuando remo veo
que el río ríe y también río.
Hay que ser cortés!

389
Cielo cubierto.
El pato atrapa un pez.
El río aplaude.

Llego a los rápidos, luego una cascada, otra y otra, finalmente el remanso y la calma.

396
En la laguna,
los peces de colores,
mecen las algas.

Busco cobijo en aquella playa donde me dispongo a pescar, comer y descansar.
Una hondonada profunda escondida entre sauces anegada por la crecida de días atrás, contiene peces fáciles de atrapar.

Entre montañas
refugio multicolor
cobija mi alma.

Así transcurren las semanas, cazando y pescando sin pensar. En esas dos semanas casi no diviso un alma. Sólo las vistas y ruidos naturales del entorno son la deseada compañía y brindan la paz tan buscada.

sábado, 14 de marzo de 2009

DE VUELTA A LA CIUDAD.

Haibun por Carlos R. Curiel

Volvimos a la ciudad, después de varios meses en el campo. Sentíamos claustrofobia.

Otra vez el trabajo, los ruidos fuertes, el estrés del tránsito vehicular, el peso de las responsabilidades nos abatían más que antes de las vacaciones.

264
Acá y allá
bocinas, timbres y sirenas.
No hay luz de sol.

El verano divertido de los días de playa y distensión se volvió fastidioso y detestable.

253
El cielo lanza
Truenos y relámpagos.
El gato huye.

Por fin llegó el domingo, lluvioso y quieto, un bálsamo para el espíritu.

267
Ciudad callada
bañada por la lluvia.
Domingo quieto.

266
Vocea canilla
Llueve en el asfalto
Pasa un camión.

HAIBUN DEL VAGABUNDO

por Carlos R. Curiel

Viajé por este mundo escudriñando un lugar que sintiera mío. A veces parecía que lo había hallado y luego debía continuar mi camino, buscando, buscando…
Veía paisajes, situaciones y personas. Cuanto más veía más aprendía.

434
Fui como el río,
cambiando de lecho
y de morada.

Anduve por el mundo tras las verdades y el asombro me asedió por todas partes.
Desde siempre sentí gran curiosidad y voluntad de aprender lo fundamental de las realidades de la vida. Busqué imágenes, escuché voces de gurúes y leí a los hombres sabios. Llegué a conclusiones acertadas, pues la verdad se transparenta y coincide en mil encrucijadas.

458
Camino solo
dentro de mi memoria
La tierra rota.

Llevó tiempo comprender que estamos en este mundo para cumplir una misión posible e importante. El ego es enemigo que engaña. Debemos observarlo sin seguir sus consejos equivocados.

466
De tanto sembrar y escribir,
a veces florece una rosa.

sábado, 28 de febrero de 2009

A TRAVES DE MONTES Y RECUERDOS - Haibun

por Carlos R. Curiel

Aquella semana de vacaciones, por primera vez, llevaba a mis hijos para que conocieran algo de mi infancia junto a mi abuelo, en los bosques montañosos del estado de Utah.
Llegamos al mediodía y dejamos nuestro vehículo al pie de la montaña.
Caminamos muchas millas y trepamos sorteando bosques, arroyos que bajaban cada vez más débiles, a medida que el frío del otoño, presagiando el invierno que pronto llegaría, los iba congelando.
Algún pájaro parecía despertar a nuestro paso. Su aleteo y su grito me recordaban vívidamente el pasado adormecido dentro de mi corazón.
Pájaro azul:
los ecos de tu canto
evocan el ayer.

Pasamos cerca de un pequeño pueblo antiguo, con muy pocas casas, una capilla y un pequeño cementerio. Algunas intrépidas aves aún no decidían abandonar el bosque hacia climas más cálidos.
Pronto llegó la noche y el cielo nos mostró toda su portentosa belleza, entre los subidos tonos del otoño.
279
Fulgor de plata
entre hojuelas de oro.
Luna de mayo.

Metidos en el bosque de álamos y pinos, en la alta montaña, escalando junto a la quebrada, buscábamos la pequeña casa de piedra de mi abuelo.
303
La quebrada traga nubes,
transpira álamos y pinos.

Transcurrieron muchos años y la topografía había cambiado bastante. El monte era más tupido que entonces.
Finalmente, recorriendo la rivera del arroyo, que había cambiado de curso, dimos con la casa. Parcialmente destruida por las tormentas y el paso del tiempo, íbamos a tener que trabajar mucho para reacondicionarla.
314
Cabaña oculta
entre pinos y álamos.
El sol no la ve.

Hicimos un fuego y armamos la carpa para pasar la noche junto a la cabaña.
312
Bosque oscuro.
En un claro, la luna
y la galaxia.

A la mañana siguiente, nos aprestamos a escalar hasta la cima.
Un nevado pico de la montaña se reflejaba claramente en el lago.
305
Montaña azul
coronada de blanco,
el lago te plagia.

Seguimos trepando hasta alcanzar la cumbre. Un enorme cóndor nos vigilaba de cerca.
La vista de los bosques, el valle y el lago robaban el alma.
293
Extasiado veo
el valle y el lago.
Cóndor testigo.

Nos sentíamos pequeños en medio de tanto prodigio de la Natura.
298
De lo alto
de este cerro enorme,
veo chica la vida.

domingo, 22 de febrero de 2009

HAIBUNS PRESAGIANDO EL OTOÑO

HAIBUN = PROSA + HAIKUS
Haibun es prosa que describe momentos memorables de la vida, con la presencia de haikus que cuentan parte de la misma historia sintetizada.

DEL VELERO


Esa madrugada de otoño partió en su velero hacia el barco hundido a probar las velas nuevas.
Yo me quedé podando el ligustro que nos privaba del sol de la mañana.
Luego fui hasta la costa buscándola anhelante.

6
Amancay de oro,
saludas de la costa,
la viste pasar?

Huyeron dos nubes espesas que ocultaban el sol y pude divisar la nave azul, como a tres millas de distancia, besando el horizonte con sus velas tan blancas.
Una gaviota remontó el vuelo desde la playa donde me encontraba hacia mi amada, como si hubiera leído mi pensamiento.

2
Ágil gaviota,
lleva mis nostalgias
a la marinera!

Hice señales con un espejo para que me viera y contento advertí cómo la proa de su nave enfilaba hacia donde me encontraba.

7
Amantes estelas
dibuja el velero
que te trae a mí.

DEL IDILIO

Caía la tarde. El torrente canturreaba agua clara.

380
Baja cantando
el arroyo montañés
música fresca.

Encendimos una hoguera para nuestro abrigo.

621
El viento juega
con las hojas de otoño
ya van al fuego.

Nos recostamos sobre un colchón de hojas de oro y carmín.
Ella, con las mejillas encendidas. Yo, no podía ocultar mi prisa.
Era la última vez . Queríamos paralizar el tiempo.
Árboles y pájaros inconsolables testigos de nuestra despedida.

3
Alerces y ñirés,
mudos espectadores
de nuestras huidas.